Los metales que comercializamos que se emplean en joyería
En CODAM, comercializamos metales que se emplean en una gran variedad de usos. En esta ocasión, queremos hacer referencia a esos metales que tienen un interesante uso en el campo de la joyería, como consecuencia de sus propiedades y características particulares.
El zamak
Las aleaciones de zamak se destacan por tener una gran calidad en la combinación de 95% zinc y el resto, aluminio y cobre, que pasa a convertirse en un excelente material, con una dureza adecuada para ser empleada en distintos accesorios del mundo de la moda y la joyería. Además, los productos ya terminados se destacan por un chapado excelente para la creación de todo tipo de piezas, como pueden ser los colgantes, los aros, los collares, las pulseras, entre otros.
El zamak es fácil de fundir, por lo que es sencillo emplearlo para generar distintas formas, con una gran calidad de detalle. Es un material completamente hipoalergénico, por lo que es apto para su uso diario, incluso en las pieles más sensibles. Además, las joyas de zamak son fáciles de bañar con plata o con oro, lo que permite realzar la belleza de las piezas.
Otra de las ventajas del uso del zamak en joyería tiene que ver con que se generan piezas que no requieren de cuidados especiales. Son fáciles de cuidar y de mantener en excelentes condiciones, siendo suficiente su lavado con agua y algún jabón normal. Se recomienda
mantener las piezas en su estuche o bolsa original para que no se mezclen con otras, lo cual es un cuidado básico que se tiende a recomendar en joyas de todos los metales.
El zamak está especialmente diseñado para personas con pieles sensibles y no genera tipo alguno de erupción cutánea. Además, es una aleación confiable, que permite mantener la piel saludable y limpia.
Conoce sobre el uso cotidiano del Zamak
El níquel
El níquel es un metal de transición. Es dúctil, maleable y denso y altamente resistente a la corrosión. Su apariencia es metálica y lustrosa, con un color plateado brillante o blanco.
En el campo de la joyería, el níquel se ha empleado especialmente para lo que se conoce como baño galvánico/electrolítico. No obstante, su uso se ha discontinuado hace tiempo. Hoy en día, se encuentra presente con fuerza en todo lo que es joyería de acero inoxidable, no representando ningún peligro o riesgo para la salud de quienes la emplean.
Cuando el níquel se une al hierro, es que se produce el acero inoxidable. Es cuando se llega a este punto que se abre un gran abanico de posibilidades de productos a fabricar para la vida cotidiana, como es el caso de las joyas y los relojes. Al ser un metal muy presente en todo tipo de materiales quirúrgicos, se encuentra en joyas para perforaciones y en otras de uso diario que no generan alergias ni son rechazadas por la piel.