Cobre y medio ambiente

El cobre es un metal que contribuye de distintas formas a la sustentabilidad del planeta y a la protección del medio ambiente. A continuación, vamos a ver de qué hablamos cuando hablamos del cobre y por qué es beneficioso para el ambiente.

¿Qué es el cobre?

Por definición, podemos decir que el cobre es un elemento químico, cuyo número atómico es el 29. Es un metal de transición que se caracteriza por su color rojizo y que es popular por ser uno de los principales metales conductores de electricidad. Al mismo tiempo, el metal se destaca por tener una muy alta maleabilidad y ductilidad.

¿Por qué el cobre es bueno para el medio ambiente?

Hoy en día, el cobre forma parte de una gran diversidad de productos, especialmente en el campo de los elementos electrónicos y eléctricos, como también particularmente en el cableado. Pero, además, distintas industrias están promoviendo el uso del cobre, debido a que se viene apostando cada vez más por materiales que puedan ser adecuados para el cuidado del medio ambiente. A continuación, te contamos algunas de las razones por las que el cobre es positivo para el ambiente:

Larga vida útil

Una de las razones por las que se piensa en el cobre como un material ecológico tiene que ver con su larga vida útil. Se estima que alrededor de dos tercios de las 550 millones de toneladas de cobre que han sido producidas desde el año 1900 se encuentran todavía en uso en distintas aplicaciones y productos. Esto reduce la necesidad de producir cobre nuevo.

Reciclable

En segundo lugar, gran parte del interés que los distintos sectores están teniendo por el cobre tiene que ver con que es un material reciclable en un 100%. Esto quiere decir que, luego de su uso, los productos que son fabricados en cobre pueden pasar nuevamente al proceso productivo para la generación de productos nuevos. Cada año, se estima que cerca de 9 millones de toneladas de cobre son recicladas. Además, hay que tener en cuenta que el cobre es uno de los pocos materiales que se puede reciclar en su totalidad sin que ello implique pérdidas en su desempeño.

En relación con esto, es importante mencionar que no se ha encontrado diferencia en la calidad del material que es reaprovechado que aquel que se fabrica nuevo. Además, el proceso de reciclaje del cobre puede consumir hasta un 85% menos de energía que la necesaria para la producción primaria. Finalmente, hay que destacar que eso representa un ahorro estimado anual de 100 millones de MWh de energía eléctrica, como así también cerca de 40 millones de toneladas de dióxido de carbono.

Acuicultura

Finalmente, el cobre es uno de los materiales más importantes en la actualidad en el sector de la acuicultura. Esto se debe a que las jaulas que se fabrican en cobre para la crianza de peces son altamente resistentes a la corrosión, a la vez que poseen características anti-incrustantes, mejorando la productividad y reduciendo los costos en mantenimiento.