Usos de la batería de níquel-litio

Hoy en día, hacemos uso de baterías en la mayor parte de los dispositivos que nos rodean.
Forman parte fundamental en las oficinas y otros espacios de desarrollo laboral, como así también en los propios hogares. Las baterías se pueden encontrar en la actualidad en muchas formas, tamaños, pesos y por sobre todas las cosas composiciones. En esta ocasión, nos interesa especialmente hablar acerca de las baterías de níquel-litio.

Hablemos de las baterías de níquel-litio

La batería de níquel-litio es también conocida como batería Ni-Li por las letras principales de sus componentes. Es una batería especialmente recargable, experimental, que utiliza especialmente un cátodo de hidróxido de níquel y un ánodo de litio.
Los dos metales que componen esta batería no se pueden usar juntos normalmente ya que no hay electrolitos compatibles con ambos. No obstante, hay un tipo de diseño que hace uso de una capa de vidrio poroso para separar dos electrolitos en contacto con cada metal.

¿Por qué níquel?

El níquel es uno de los materiales por excelencia en la fabricación de baterías, formando parte de combinaciones con otros metales para estos objetivos. Se componen de hidrógeno, níquel y otro metal como es el titanio. Algo a destacar especialmente es que las baterías de níquel son las más baratas de producir. Esto ha llevado también desde hace mucho tiempo atrás a que sean las más extendidas y más utilizadas a nivel mundial.
Las baterías de níquel tienden a requerir de un mayor tamaño y peso para poder generar altos niveles de energía. No obstante, también es cierto que cualquier posible defecto o error es sencillo de reparar y de solventar con este material. Podemos decir, además, que las baterías de níquel se pueden ver especialmente en el prototipo Yaris Hybrid-R o su versión comercial de calle.
Si bien es cierto que hay una tendencia creciente a apuntar hacia el litio para las baterías, el níquel sigue siendo el material por excelencia para su fabricación. Su uso se ha extendido a nivel mundial desde hace mucho tiempo. Por eso, hoy en día, es posible decir que la mayor parte de las baterías que se consiguen en el mercado siguen desarrollándose en níquel como material por excelencia para generar baterías de calidad.